¿Quién puede contratar a un abogado en caso de que la víctima tenga una lesión personal?

A group photo of the Chicago injury lawyers of Salvi, Schostok & Pritchard P.C.

Cuando ocurre un accidente y alguien sufre una lesión personal, a menudo no está en condiciones de tomar decisiones legales de inmediato. En estos momentos, surge una pregunta clave: ¿quién puede contratar a un abogado en nombre de la víctima?

Ya sea por el estado físico de la persona afectada, su edad o alguna condición médica que le impida actuar por sí misma, la ley reconoce a ciertas figuras que pueden dar ese paso en su lugar. Es por ello que en este artículo, le explicamos quiénes pueden contratar a un abogado en estas situaciones y por qué hacerlo lo más pronto posible puede ser crucial para el resultado del caso.

¿Qué es una lesión personal? 

Antes de entrar en quién tiene la autoridad legal para actuar, es fundamental entender qué se considera una “lesión personal”. Dentro del marco legal, se refiere a cualquier daño físico, emocional o psicológico que alguien sufre debido a un acto negligente o intencional de otra persona o entidad.

Las lesiones personales pueden originarse en diversos escenarios, tales como:

Estas lesiones pueden variar desde daños menores, como contusiones o esguinces, hasta situaciones graves que involucren discapacidades permanentes, traumas psicológicos severos o incluso la muerte.

Cuando una persona resulta lesionada debido a la negligencia de un tercero, tiene derecho a buscar compensación por los daños sufridos. Sin embargo, iniciar el proceso legal requiere asesoría especializada para garantizar que se cumplan los requisitos formales y que se defiendan correctamente sus derechos.

¿Quién puede contratar a un abogado en estos casos?

Por lo general, la persona que ha sufrido una lesión tiene el derecho legal de contratar a un abogado. Sin embargo, hay momentos en los que otra persona puede tomar esa decisión en su lugar:

1. Padres o tutores legales (si la víctima es menor de edad)

Cuando la víctima es menor de 18 años, no puede firmar acuerdos legales por sí misma. En estos casos, los padres, tutores legales o representantes legales son quienes pueden contratar un abogado para proteger los derechos del menor y gestionar cualquier reclamo o demanda en su nombre. Esto asegura que los menores reciban la compensación y atención que merecen sin demoras ni complicaciones legales.

2. Apoderado legal o representante designado (si la víctima está incapacitada)

Si la persona ha quedado inconsciente, ha sufrido una lesión cerebral o está médicamente incapacitada, un familiar cercano o un apoderado designado puede actuar en su nombre. Esto puede requerir una autorización formal o un poder legal, dependiendo de las leyes del estado.

3. Familiares inmediatos en casos graves o de muerte

En situaciones extremas, como una lesión catastrófica o la muerte, los familiares inmediatos (cónyuge, hijos, padres) pueden iniciar el proceso legal mediante una demanda por lesiones personales o por muerte injusta.

En cualquiera que fuesen estos escenarios, el objetivo clave es el de proteger los derechos de la víctima y sobre todo, asegurar que los responsables rindan cuentas ante los daños hacia la persona o personas. 

El proceso legal cuando un representante actúa en nombre de la víctima

Cuando una persona lesionada no está en condiciones de tomar decisiones legales por sí misma, el papel del representante legal o familiar es fundamental para garantizar que el caso avance y que se protejan los derechos de la víctima. Entender cómo funciona este proceso es esencial para evitar demoras y complicaciones legales.

El representante debe actuar con la debida diligencia, lo que implica:

  • Obtener la documentación legal necesaria: en muchos casos, para contratar un abogado y actuar legalmente en nombre de la víctima, es necesario contar con un poder notarial, una tutela legal o una autorización judicial que formalice esta representación.
  • Mantener comunicación constante con el abogado: el representante debe proporcionar toda la información médica, antecedentes y detalles relevantes para que el abogado pueda evaluar y construir un caso sólido.
  • Tomar decisiones informadas: aunque el abogado brindará asesoría experta, el representante debe tomar decisiones basadas en el mejor interés de la víctima, siempre buscando proteger sus derechos y bienestar a largo plazo.
  • Velar por los plazos legales: el representante debe actuar con rapidez para no perder fechas límites, como el estatuto de limitaciones, y para asegurar la recolección oportuna de evidencia.
  • Participar en negociaciones y procesos judiciales: en algunos casos, el representante puede ser quien asista a reuniones, firme acuerdos o participe en audiencias, siempre con el respaldo y guía del abogado.

Es importante destacar que la ley protege a las víctimas al permitir esta representación, pero también exige que el representante actúe con responsabilidad, transparencia y en beneficio exclusivo de la persona lesionada.

¿Por qué contratar a un abogado es fundamental?

El sistema legal puede ser un verdadero rompecabezas, y las aseguradoras a menudo no ofrecen una compensación justa sin que se les empuje legalmente. Al contratar a un abogado, no solo obtienes representación en el tribunal, sino que también te aseguras de:

  • Asesoría desde el inicio: un abogado puede orientarle sobre los pasos a seguir, la documentación necesaria y cómo proteger sus derechos desde el primer momento.
  • Recolección de evidencia: los abogados expertos saben cómo y cuándo recopilar pruebas, incluyendo informes médicos, testimonios y fotografías, que son esenciales para fortalecer su caso.
  • Evitar errores comunes: sin asesoría legal, las víctimas o sus representantes pueden cometer errores que debiliten la demanda, como aceptar acuerdos insuficientes o hacer declaraciones perjudiciales.
  • Calcular una compensación adecuada: un abogado calcula no solo los daños visibles actuales, sino también los futuros, como gastos médicos prolongados, pérdida de ingresos y sufrimiento emocional.
  • Negociación y litigio: los abogados manejan la comunicación con aseguradoras y terceros, buscando acuerdos justos o, si es necesario, representándole en juicio.
  • Cumplimiento de plazos legales: en Illinois, el estatuto de limitaciones impone plazos estrictos para presentar demandas. Un abogado asegura que su caso se presente dentro del tiempo establecido.

Y sobre todo, muchos abogados trabajan bajo honorarios de contingencia, lo que significa que usted no debe pagar hasta que el caso resulte a su favor. 

¿Cuánto tiempo tengo para poner una demanda por lesiones personales?

El tiempo que usted tiene para presentar una demanda por lesiones personales está determinado por lo que se conoce como el estatuto de limitaciones. Este plazo puede variar según el estado, pero en Illinois, por ejemplo, generalmente tienes dos años a partir de la fecha en que ocurrió el accidente o cuando se identificó la lesión.

Este límite se aplica tanto si la víctima presenta la demanda directamente como si un familiar lo hace en su nombre. Si usted deja pasar este tiempo, la demanda puede ser desestimada automáticamente, sin importar cuán grave sea la lesión o cuánta evidencia tenga.

Por ello, si está pensando en contratar a un abogado para representar a una víctima, es crucial que lo haga lo antes posible. Un abogado se asegurará de que su caso cumpla con todos los requisitos legales y que se presenten los documentos dentro del plazo correspondiente.

¿Qué pasa si no actúa a tiempo?

El tiempo juega un papel fundamental. Cada estado establece un plazo de limitaciones, que es el tiempo legal que tienes para presentar una demanda.

Si usted o alguien cercano ha sufrido una lesión, es vital que actúe con rapidez. Si la víctima no puede hacerlo, un representante adecuado debe buscar un abogado lo más pronto posible para iniciar el proceso.

Nuestro equipo legal trabaja mediante honorarios de contingencia, por lo que si usted no recibe una compensación, nosotros tampoco lo haremos. Llene el formulario de contacto y agende una consulta gratuita ahora.

Patrick A. Salvi II joined Salvi, Schostok & Pritchard P.C. in 2007 and was named Managing Partner of the Chicago office in 2017. He concentrates his legal practice on cases concerning personal injury, medical malpractice, mass torts, and product liability.