Ceguera causada por negligencia médica

Los adultos y los niños en todo Illinois sufren de ceguera total o parcial que puede atribuirse a negligencia médica. Los errores médicos que pueden conducir a la pérdida de la visión entre los pacientes incluyen diagnósticos erróneos o retrasados, errores quirúrgicos y no monitorear adecuadamente a los pacientes de alto riesgo de enfermedades oculares, como los bebés prematuros. Además, muchos pacientes sufren ceguera debido a infecciones bacterianas causadas por la exposición a manos sin lavar o equipos médicos sin esterilizar.

Nuestros abogados con experiencia en negligencia médica en Salvi, Schostok & Pritchard P.C. saben que la ceguera puede ser física, emocional y económicamente dañina para las víctimas y sus familias. Si un error médico provocó que usted o su ser querido sufrieran ceguera, queremos ayudar.

En el transcurso de cuatro décadas, hemos obtenido más de $1.5 mil millones en acuerdos y veredictos en nombre de nuestros clientes. Sabemos cómo identificar los errores médicos que conducen a lesiones como la ceguera, y sabemos cómo buscar la justicia y la compensación que merecen las víctimas. Para discutir su caso en una consulta gratuita, llámenos o comuníquese con nosotros en línea hoy mismo a través de nuestras oficinas en Chicago y Waukegan.

Errores de diagnóstico y ceguera

Muchos pacientes sufren ceguera debido a que un médico no diagnostica y trata oportunamente la afección médica que es la causa subyacente de la pérdida de la visión. De hecho, la mayoría de los reclamos por negligencia médica en nuestro país involucran errores de diagnóstico, informa Diederich Healthcare (información en inglés) en Medical Malpractice Payout Analysis de 2018. A menudo, la falta de diagnóstico o diagóstico retrasado (información en inglés) se debe a que el médico no detectó los síntomas y solicitó las pruebas adecuadas.

Por ejemplo, la degeneración macular relacionada con la edad (AMD, por sus siglas en inglés) es una de las principales causas de pérdida de visión entre los adultos mayores en nuestro país. Sin embargo, en un estudio publicado en 2017 en JAMA Ophthalmology (información en inglés), los investigadores encontraron que aproximadamente el 25 por ciento de los casos de AMD no fueron diagnosticados por los médicos en las clínicas de atención primaria de la vista. Como señala AARP (información en inglés), AMD es una enfermedad incurable. Aún así, hay muchas formas de tratamientos disponibles para detener la progresión de la enfermedad – pero solo si los médicos detectan la afección y administran el tratamiento a tiempo.

Las cataratas y el glaucoma son otros ejemplos de afecciones que los médicos, como los optometristas y los oftalmólogos, pueden no diagnosticar porque no detectan síntomas o no solicitan pruebas especializadas. Sin embargo, la ceguera también puede ser el resultado de que un médico no detecte otros tipos de afecciones que pueden conducir a la pérdida de la visión, como diabetes o presión arterial alta.

Errores quirúrgicos y ceguera

Muchos pacientes sufren pérdida de visión debido al trauma que experimentan durante un procedimiento quirúrgico. Un médico que opera los ojos o cerca de ellos, por ejemplo, puede cometer un error quirúrgico que dañe el ojo o los nervios ópticos. Este tipo de errores quirúrgicos con frecuencia causan daños irreversibles.En otros casos, el hecho de que el equipo quirúrgico no monitoree a un paciente por falta de flujo sanguíneo puede provocar daños en los nervios ópticos. Esta condición se conoce como neuropatía óptica isquémica (ION, por sus siglas en inglés). Puede resultar en ceguera parcial o total y, en la mayoría de los casos, la pérdida de la visión es permanente. En un estudio publicado en 2011 en The Journal of Anesthesia & Clinical Research (información en inglés), los investigadores encontraron que este tipo de pérdida de visión posoperatoria era más común entre los pacientes que se sometieron a cirugía de corazón y columna.

Lesiones de nacimiento, errores pediátricos y ceguera

El Hospital Infantil de Boston (información en inglés) informa que casi la mitad de los 28,000 bebés que nacen prematuramente cada año en los EE. UU. sufren de una afección llamada retinopatía del prematuro (ROP, por sus siglas en inglés). Como describe el hospital, la ROP ocurre cuando un niño nace antes de que los vasos sanguíneos que alimentan la retina se hayan desarrollado por completo. La interrupción de su crecimiento puede causar la formación de vasos anormales que pueden tener fugas y causar cicatrices en la retina. En el peor de los casos, la retina puede desprenderse.

La negligencia médica a menudo radica en que un médico no supervisa adecuadamente a un bebé (información en inglés) que enfrenta un alto riesgo de desarrollar ROP. Por ejemplo, cuanto antes nace un niño y, a su vez, cuanto más liviano pesa, más probabilidades hay de que sufra de ROP. La afección puede tratarse y puede retroceder. Sin embargo, si un médico no diagnostica la afección de manera oportuna y adecuada, el niño puede enfrentar una discapacidad visual permanente.

Infecciones bacterianas y ceguera

Aunque es raro, un paciente también puede desarrollar una infección bacteriana (información en inglés) en el ojo después de someterse a un tratamiento en un hospital o clínica. La infección puede provocar ceguera. En los casos más graves, es posible que sea necesario extirpar el ojo del paciente.

Por ejemplo, la endoftalmitis es una infección bacteriana que afecta el interior del globo ocular. La enfermedad generalmente resulta de la exposición a bacterias como estafilococos o estreptococos. Esas formas de bacterias se pueden transmitir fácilmente a través de la exposición a la piel de otra persona, según la Asociación Americana de Oftalmología Pediátrica y Estrabismo (información en inglés).

Entonces, en la mayoría de los casos, la enfermedad podría haber sido prevenida por un profesional médico simplemente tomando el paso básico de lavarse las manos o asegurándose de usar solo equipo esterilizado en un procedimiento que podría exponer el interior del globo ocular a bacterias dañinas. Lamentablemente, incluso cuando se trata con antibióticos y/o cirugía ocular, un paciente con endoftalmitis aún puede sufrir problemas de visión o pérdida de la vista.

Cómo pueden ayudarle nuestros abogados de negligencia médica en Chicago

Con nuestra amplia experiencia en el manejo de reclamos por negligencia médica, los abogados de Salvi, Schostok & Pritchard P.C. sabrán cómo investigar su caso, revisar sus registros médicos y determinar si la negligencia de los profesionales médicos  causó que usted o su ser querido sufrieran ceguera. También consultaremos con expertos de alto conocimiento en campos como la oftalmología. Un experto puede examinar la evidencia en su caso y ayudarnos a determinar si los médicos u otros profesionales médicos no cumplieron con el estándar de atención relevante y si esa falla causó la pérdida de la visión.

Nuestra preparación marca la diferencia para nuestros clientes. Usaremos esa preparación como palanca cuando busquemos un acuerdo que lo compense completa y justamente por sus pérdidas, como sus facturas médicas, pérdida de ingresos, dolor, sufrimiento y pérdida del disfrute de la vida. Al mismo tiempo, estaremos preparados para presentar el caso más sólido posible en el tribunal.

Sobre todo, puede contar con los abogados de negligencia médica de Salvi, Schostok & Pritchard P.C. para prestar mucha atención a sus necesidades a lo largo de su caso. Entendemos lo devastador que puede ser para los pacientes sufrir ceguera debido a una negligencia médica. También nos damos cuenta de la carga que la ceguera puede imponer a los miembros de la familia. Buscaremos agresivamente un acuerdo o veredicto que aborde el daño que ha sufrido sin que sea culpa suya. Tampoco le cobraremos honorarios legales a menos que garanticemos una recuperación financiera para usted.

Todo comienza con una consulta gratuita. Conéctese con nosotros a través de nuestras oficinas en Chicago y Waukegan y discuta su caso con uno de nuestros abogados de negligencia médica altamente capacitados y compasivos hoy.